Capítulo 22
Yasuko caminaba por su increíble jardín. Olía las flores que amaba cuidar personalmente. Sus pensamientos volvió a la noche anterior. Había pasado tanto tiempo desde que hablo con Tari y su corazón dio un vuelco antes su recuerdo. Su corazón estaba lleno de pena. Tristeza.
¿Qué tan diferente hubiera sido su vida si ella y Tari estuvieran juntas. Entonces, no hubiese tenido una hija y probablemente hubiera recorrido el mundo con su amada a su lado. Hubiera tenido todos los lujos que tenía ahora, pero estaría feliz. Tal vez incluso se hubiera casado con Tari. Estuviera en la cama junto a ella, todas las noches. Harían el amor todas las noches. Al igual que la noche anterior... Las mejillas de Yasuko se tornaron en un rosa claro y sonrió.
Hacer el amor... ¿Es lo que realmente hicimos...? , Se preguntó mientras continuaba adentrándose más al jardín y entró al área donde estabn los árboles frutales. Recordado que ella gritó el nombre de Tari cuando la golpeó el orgasmo. Incluso, varias veces y no había manera de que Axis no la hubiera escuchado. Hacer el amor... Lo haces con alguien que amas... No con la amiga de tu hija... Suspirando profundamente, sin saber qué pensar sobre lo que pasó anoche.
¡Me gustó mucho, lo que hicimos! ¡Fue una cosa de una vez! ¡Eso no significa nada! ¡Ella...! Ella no... significa nada... se detuvo en seco su sendero. El pensar en la sureña le hacía sentir mariposas alborotadas en su estómago. ¿¡Qué es lo que me pasa !? ¡Casi ni la conozco! Claro, sé cosas de ella... Se detuvo y comenzó a contar las cosas que sabía sobre Axis con sus dedos . Ella viene del Sur, o bien, del Norte, pero lo odia... no le gusta luchar, ama los colores verde y azul. No cualquier azul, pero si un azul celeste. Ella asintió con la cabeza ante la declaración. Axis sabía lo que quería y lo que le gustaba. Le encantaba el pescado y la carne, pero su carne debía ser cocinada a la perfección. No tan cocido, ni tan crudo.
Ella continuó a aventurandose más all huerto, aún contando las cosas que sabía sobre Axis. Aún convenciendose de que apenas conocía a la joven. Ella era una maestra vudú y una maestra agua, pero no era una maestra sangre, sabía cómo luchar con espadas duales. Ella prefería el vino de miel por encima de vino regular. También era de las personas que golpeaba primero y preguntar después. Tari hizo eso una vez... Pensó y recordó cuando Tari había golpeado a alguien en la cara en aquel mercado, preguntandole cual era su problema una vez que aquella persona cayó al suelo.
Riendo en voz baja y parandose cerca de un árbol que tenía varias manzana ya comidas en el suelo. Sonriéndo divertida. Bueno, puedo añadir otra cosa a esa lista... A ella le gustan las manzanas... Alzando la vista, pero no vio nada. Oyó que alguien mordía y maticaba una manzana. --"¿Axis...?"--, El masticar se detuvo y unos segundos después, Axis apareció, estaba colgada hacia abajo, con sus piernas rodeando una rama gruesa y la manzana en su mano. --"Mh... ¿Sí?"--
Yasuko le sonrió cálidamente a la otra mujer. --"Si tienes hambre... Puedo decirles a los criados que hagan algo para ti."-- Ella dijo, dandole un empujón a uno de los corazones de la manzana con sus pies.
Con un suave movimiento, desenganchó sus piernas de la rama aterrizando perfectamente sobre el suelo. Echándo lo último que quedaba de su manzana a un lado, dejando escapar un profundo suspiro. --"Ella lo sabe..."--
Yasuko sonrió débilmente y asintió. --"También me di cuenta... por la forma en que ambas salieron enfurecidas... ¿Supongo que no lo tomó bien?"--
Axis se encogió de hombros en un intento de parecerse que a ella no le importara, pero su rostro la traicionó. --"Sus palabras me dolieron más de lo que pensaba... Piensa que sólo estoy tirando con cualquiera ..."--, suspirando profundamente, mirando a la mujer mayor. --"No lo estoy, por cierto ... Me ha gustado lo que hicimos. Mucho. Además de Korra, nunca he estado con nadie más ... "-- Mordiéndose el interior de su mejilla.
Yasuko dio un paso más cerca de sureña, colocándo sus manos sobre sus fuertes caderas. --"A mi también me gustó."-- Mordiendo su labio inferior, no estando segura si debería continuar. --"Y... Para ser honesta ... Yo tuve una hija con Hiroshi, pero... Bueno... Él fue agradable, suave... Y yo siempre quise tener hijos ..."--
--"No tienes que explicarlo si no lo deseas."--
--"Si, lo haré. Quiero que sepas que no tomo a la ligera... Lo que hicimos. "-- Hubo un rubor en sus mejillas pálidas y Axis sonrió. Unas manos fuertes se afianzaron sobre las pálidas, los pulgares tiernamente frotó la parte posterior de las manos de Yasuko. --"Traté de convencerme de que... No significo nada. Lo que hicimos. Apenas te conozco ... "-- levantandome la vista y utilizando ambas manos para sostener el rostro de Axis. Sus pulgares frotaron con ternura en pequeños círculos sobre las mejillas morenas. --"Pero mi lista fue bastante larga... A la final, tuve que usar hasta los dedos de mis pies..." ella se rió.
Axis rió y sus brazos rodearon la cintura de Yasuko. --"Me preguntaba por qué estabas actuando de manera extraña mientras paseabas..."--
Las pálidas mejillas de Yasuko se volvieron de un color rojo oscuro. --"Tú... ¿Me viste?"--
Axis asintió y apretó el más a la mujer mayor al ras contra su propio cuerpo. Mirando hacia abajo a esos hermosos ojos de color verde oliva. --"Me gustas... Yasuko... Yo..." -- Tragando saliva y respirando hondo antes de continuar. --"Pero... cuando he amado alguien... Y durante casi toda mi vida... Yo solamente ..."--
--"Está bien ... lo entiendo."-- Ella le sonrió cálidamente a su amante, con sus manos todavía sosteniendo el rostro de Axis entre sus manos. --"Es difícil... Amar a alguien que no te los devuelva. Y está bien... Los sentimientos pueden crecer, mientras tanto... Podemos disfrutar de lo que nos da la vida ".--
La Maestra bajo su mirada a la mujer que estaba entre sus brazos. Ella hablaba con sinceridad y calidez. Con lo que dijo hizo asustar a la sureña. Sintió como su corazón aumentaba su latido. Tal vez era hora de dejarlo ir. Dejar a un lado lo que la retenía, derribar esos muros que construyó alrededor de su corazón. Era tiempo de dejar a un lado la idea de que ella y Korra estarían juntas. Korra era feliz ahora, verdaderamente feliz. Una felicidad que nunca habíera sido capaz de darle. Y tal vez, había una pequeña posibilidad de que ella pudiera ser feliz también ...
Así que cedió. Inclinandose hacia adelante y fue como si una descarga de electricidad recorriera a través de su cuerpo cuando sus labios hicieron contacto. Ambas mujeres cerraron los ojos mientras el beso continuaba. Lento y suave al principio, pero no pasó mucho tiempo antes de Yasuko separará sus labios ligeramente de los de la sureña.
Axis dejó escapar un suave 'Mhnn...' Cuando hicieron contacto ambas giraron. La mujer estaba de espaldas contra el árbol y envolviendo sus piernas alrededor de la cintura de la Maestra. Los pálidos brazos rodearon los fuertes hombros y las manos morena sostenían los muslos de Yasuko para mantenerla en su lugar.
La sesión de besos continuó durante varios minutos hasta que las cosas se calentaron un poco más. Axis se retiró un poco hacia atrás, jadeando. --"Yo... N-no aquí..."-- Tragó saliva y visiblemente luchado por mantenerse cuerda que le hacía sentir la otra mujer.
Yasuko asintió y dejó escapar un profundo suspiro. --"E- eso podría ser una buena idea... ¿Qué tal... Si nos retiramos de nuevo a la mansión...?"-- , Decía sin aliento.
Axis sonrió y dio un rápido beso sobre los labios color rosa de Yasuko. --"Estás leyendo mi mente..."--
--"Regresaré primero... Deambula dentro de la mansión un poco... Que luego te llevaré a un rincón oscuro... Y luego podemos continuar..."-- Ella dejó escapar un suave ronroneo y dio unos pasos de vuelta a la mansión.
Axis tenía una sonrisa soñadora en su rostro cuando vio que Yasuko se iba. Esperado durante varios minutos antes de que se fuera detrás de la mujer. Hizo según lo indicado, deambulando por los alrededores de la mansión un rato. De repente, mientras caminaba por uno de los pasillos vacíos, fue arrastrada dentro a una de las habitaciones más pequeñas. Su instinto se sobresalto y antes de que se diera cuenta, ella tenía a aquellla persona clavado contra la puerta cerrada. La adrenalina corría través de su cuerpo, pero sus expresiones faciales se suavizaron cuando vio quien fue la que la arrastró adentro.
Yasuko sonrió con malicia a la Maestra. --"Oh, wow... Siempre en guardia por lo que veo... Aunque no te di una clara advertencia ..."--
Axis sonrió y humedeció sus labios con ansiedad. Sin previo aviso, sus labios se estrellaron en un beso hambriento, y básicamente, rasgó el vestido que Yasuko llevaba. Exponiéndo los pechos y los pezones rosas pálidos que estaban endurecidos por la excitación. Axis gruñó como un animal salvaje y mordió con fuerza sobre la carne pálida del cuello de Yasuko. La mujer lanzó un grito de placer y se sentó en unas cajas. Axis se instaló inmediatamente entre las piernas abiertas, levantando el vestido y exponiendo la parte inferior de Yasuko.
Esto era tan diferente a lo de noche anterior. Anoche había sido lento y se exploraban la una la otra, pero esto, esto era un nuevo nivel de intensidad que nunca había experimentado antes. No le importaba si la amaba realmente. La forma en que su amante grunía, cómo fue puesta contra la puerta, antes de sentarse en alguna caja. Ella gimió sobre la boca de su amante cuando caderas empezaron a moverse contra su centro.
--" Uhm... Axis... Ahh ..."-- Gimió al instante y fue entonces que algo lentamente la invadió. Ella abrió los ojos y vio que se había movido la mano de Axis entre sus piernas abiertas. Miró a su amante a los ojos y lo que vio fue el lado crudo y primitivo de la mujer más joven. Arqueándose y moviendo sus caderas para encontrarse con los dedos de la morena para aumentar el placer.
Axis gimió y trató de ir lo más profundo posible. Ir más rápido, más fuerte y más profundo. Su cabeza se echo un poco hacia atrás y los labios color rosa se puso en contacto con los suyos. Soy tuya y tú eres mía ...
Korra se despertó lentamente y ronroneó suavemente por algo que acariciaba su abdomen amorosamente. Mirando hacia abajo, sonriendo. Su esposa ya estaba despierto. --"Bueno... ¿Has estado despierta por mucho tiempo ...?"--, Preguntó ella, tratando de reprimir un bostezo.
--"Mhn ... no, tal vez hace algunos minutos."-- Retirando su mano debajo de la blusa de Korra, incorporandose un poco. Dandole un beso en los labios de la Avatar con amor y sonrió. --"Sin embargo, he tenido una buena siesta ¿Qué hay de ti?"--
--"Mhn ... Me vendría bien dormir un poco más ..."--, murmuró, pero se enderezandose, su espalda le estaba comenzando a doler por quedarse dormida en una extraña posición. --"O tal vez debería ir a ver a Axis... Hablar algunas cosas... Nos vamos a ir dentro de pocos días."-- Volviendose a Asami y dandole un pequeño beso en la mejilla rápidamente. --"Y usted señorita, es necesario que reunas toda la ropa de invierno que tengas."-- Ella se rió. --"El Sur es un -mucho- más frío de lo que estas acostumbrada."--
Asami se echo a reír y tomó una de las manos de Korra entre las suyas. --"Hmm... Tienes razón ... y deberías.Iré adentro a buscar lo que necesito ropa. Habla con Axis, nunca es bueno estar enojada por mucho tiempo."-- Korra se levantó primero y ayudó a la pelinegra ponerse de pie. --"Estaré en mi habitación, así que cuando vengas me encontraras, cuando ambas hablen de esas cosas, ¿De acuerdo?"--
Korra asintió y se dirigió hacia el jardín mientras Asami se dirigió al interior de la casa. Yendo a la cocina primero, sirviendose poco de jugo fresco que uno de los sirvientes ya habían hecho antes. Después de que calmar su sed, mientras caminaba por los pasillos, pero se detuvo cuando escuchó algo que provenía detrás de una de las puertas.
Ella levantó una de sus cejas con perfecta curiosidad, acercandose a una de las puertas. Colocando una oreja contra ella. Todavía podía escuchar aquello sonido pero no era por detrás de esa puerta, por lo que se movió a la siguiente. Ni era la siguiente, ni la otra. Fue a una cuarta puerta , colocando su oreja contra y pudo escuchar con claridad aquella voz. ¡No era cualquier voz, era la de su propia madre! ¿En el nombre de Raava ...? ¿Por qué ellos...? Espera... ¡Ese no es mi padre él que esta con ella ...! Pensó, y sin dudarlo, abrió la puerta.
Ella se quedó sin aliento ante lo que vio. Yasuko sentada en el regazo de alguien. Su vestido había sido rasgado y tanto su espalda, así como su pecho, que probablemente, estaban expuestos. El resto de su vestido apenas la cubría nada y dejaba poco a la imaginación. --"¡Mamá! ¡¿Que estas haciendo?!"--
Yasuko rápidamente envolvió sus brazos alrededor de su amante para cubrirse y miró por encima del hombro. --"¡A-Asami! ¡¿Podría por favor darte la vuelta?! "--
--"¡Mamá! ¿Es en serio? ¡¿Que demonios?! ¿Por qué le haces esto a papá! "--
--"¡Asami, cálmate, no es lo que piensas!"-- Ella trataba desesperadamente de explicarle y de cubrirse con lo que le sobraba de su vestido.
--"Claro, ¿No estás teniendo sexo con un chico en una habitación de suministro?"--, Preguntó con sarcasmo.
--"Bueno... No es un chico... N-no..."-- Aclarando su garganta, dandose la vuelta lentamente, sus pechos estaban cubierto una vez más y el resto de la tela cubría el resto de su cuerpo como debía. Por último, con la persona que estaba apareció antes su vista y Asami estaba más sorprendida que nunca.
--"¡¿Axis?!"-- no se sentía bien y toda la habitación empezaba a dar vueltas. Ella se sostuvo sobre el marco de la puerta para no caerse, pero fue demasiado tarde.
--"Oh, mierda..."-- tanto Axis como Yasuko tanto fueron rápidamente hacia delante para atraapar a la heredera que estaba a punto de hacer contacto con el frío suelo. Axis atrapó a la pelinegra, aferradola con fuerza y lentamente se sentó y colocando parcialmente Asami sobre el suelo. Sosteniéndo a la mujer inconsciente, su rostro pálido estaba escondido en su cuello, mientras que las tres de ellas estaban sentanda sobre sus rodillas en el suelo. La sureña cargo el cuerpo desmayado de la embarazada y Sato comprobó su pulso con sus dos dedos contra el cuello comprobando que estaba bien.
--"Bueno... Las cosas no pueden ser posiblemente más incómoda como lo están ahora..."-- dijo Yasuko y Axis estuvo de acuerdo con un solo movimiento de cabeza. Con ternura acariciaba la espalda de su hija.
Oh God... pobre Asami!!!!
ResponderEliminarEncontrar a su madre teniendo sexo fue, aparentemente, muy duro para ella.
Si ya de por sí es bastante traumático encontrar a tu madre teniendo sexo y escucharla gemir (experiencia propia. Es muy, muy traumático), verla con alguien que no es su padre debió ser mucho peor.
a ver que pasará cuando despierte en el próximo cap.
Saludos y gracias por tus traducciones!!!!
jajajajajajajajaja te entiendo a mi igual me paso y no pude dormí jajajjaja estaba como de 10 años xD. Bueno ya veremos que pasara xD
EliminarY bueno esto lo hago con el fin que todos disfruten de una buena lectura :3 me alegro de que te guste =D
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