"Y como siempre digo el fic no es mio es de Josy1986 :3"
Capítulo 4
La batalla continuaba. Axis y Korra estaban en la cubierta superior de aquel barco. Su padre y el resto del grupo estaban debajo de la cubierta. Los hombres se abrieron, dejando muertos a su paso. Los cadáveres de los asaltantes yacían esparcidos por todo el barco.
Tonraq utilizó su increíble habilidad de agua control para acortar el camino. Tenía que ir a donde estaba su hija y su amiga. Sabía que eran capaz de luchar, pero sus instintos paternales aún rugía en su interior. Si algo le sucediera a ellas... nunca se lo perdonaría.
Axis podría no tener su sangre, pero aquella joven significaba mucho para el orgulloso jefe. La había encontrado hace muchos años. Solitaria. Abandonada. Asustada. Se dio cuenta que por su piel bronceada, que al menos, uno de sus padres pertenecía al parecer a la Tribu de Agua. Ambos iris de un color azul oscuro, rodeado de un pequeño círculo de un color turquesa le había hecho sentir una calidez en su corazón. Era tres años mayor que Korra. Ambas se hicieron amigas muy cercanas y juntas entrenaron duro hasta que se convirtieron en las mujeres que son hoy en día.
Finalmente llegó a la cubierta superior. La escena ante el era exactamente lo que había esperado. Korra utilizaba su espada de hiel para cortar la garganta de uno de los hombres. Cayendo al suelo, mientras agarraba su cuello. Hacía un intento desesperado con sus manos de que la esencia de su vida no se escapara. Que fue un fracaso total.
Mientras que Axis usaba una combinación entre sus habilidades de agua control y el manejo de su espada. Cortando un brazo aquí y otro por allá. Incluso fue testigo de como ella decapitaba a un hombre de un solo golpe. Estaba totalmente cubierta de sangre y disfrutaba cada segundo de ello.
Mirando de nuevo a Korra. Que también estaba cubierta de sangre, pero la cantidad de los enemigos que las rodeaba a ambas, ella había derrotado a pocos, haciendo que ambas mujeres estaban totalmente cualificadas para una batalla. Aunque muchas de las victimas de su hija aún seguían vivos. Apenas. Pero con vida. Axis aprendió desde muy joven como tomar una vida. Parecía tener la extraordinaria capacidad nuevas maneras de matar a sus victimas.
Y para ser honestos, no podía culparlas por ello. Pues lo que había escuchado de Korra y lo que aquellos hombres le habían hecho a su cautiva. Este castigo era algo que se les veía venir a ellos.
"{¡Papá! ¡Ya era hora! ¡Pensé que nos quedaríamos sin más escorias que matar antes de que fueras capaz de unirte a nosotras!}" Riéndose disimuladamente, pero tuvo que moverse a un lado para poder esquivar una ráfaga de fuego. "{¡Mierda...!}"
Sonriendo su padre "{¡Ten un poco de fe en tu viejo, Korra!}" Riendo entre dientes, creo una pequeña pieza, pero muy fuerte de hielo con el agua que tenía en su odre. Enviandolo hacía al maestro fuego que aquel pedazo de hielo se incrusto muy profundo en su pecho. Cayendo de inmediato al suelo. Después retorciéndose en el suelo hasta quedar muerto.
Los guerreros de la Tribu de Agua luchaba duramente. Los asaltantes también tenía maestros dentro de su tripulación. Aunque los maestros tierras eran inútiles estando en medio del mar. había un buen número de maestros fuegos y agua entre ellos. Algunos de los guerreros tenían quemaduras graves en sus manos, brazos y pecho.
Lucharon con valentía y con el poder de la luna llena, eran capaces de atacar al mismo tiempo a muchos asaltantes. Pero ocho contra toda una tripulación de asaltantes era demasiado, pero poco a poco, la energía de ellos comenzaba a disminuir.
Korra enviaba pedazos de hielo afilados en cualquier dirección. Desafortunadamente para ella, un maestro agua utilizo la fuerza de su tiro, redirigiendo de nuevo el ataque. El fragmento perdido estaba a pulgadas. Oyendo un profundo gemido que vino de atrás y vio que aquello alcanzo a su padre en su hombro izquierdo "{¡PAPÁ! ¡NO!}" Volteándose para echar a correr en ayuda de su padre, dejando a Axis valerse por si misma. Gimiendo de dolor y apretando sus dientes tratando de no gritar.
"{¡Axis! ¡AXIS!}" Korra gritaba el nombre de su amiga, mientras una mano presionada la herida de su padre.
"{¡Estoy un poco... Ocupada!}" Contesto Axis, gruñendole a cualquiera que intentara acercase a ella. Mientras ella luchaba, se iba moviendo hacía atrás. Ella jadeaba. El agotamiento lentamente empezaba a dominar su cuerpo, pero se negaba a ceder.
"{Puedo... Puedo usar...}" Comenzó a decir Korra, pero fue interrumpida por su amiga.
"{¡No!¡No! ¡No te reveles a ti misma! Yo puedo..."} Algo golpeo fuertemente la cabeza de Axis, derribándola. Cayó junto a Korra y Tonraq. Estaba aturdida por unos segundos, sacudiendo su cabeza para recuperar el enfoque. Ella miraba a Korra, su padre y luego a los asaltantes. El ataque se había detenido pero aquellos asaltantes crearon un círculo alrededor de ellos, que poco a poco se iban acercando.
Ella frunció el ceño, respirando profundamente. Necesitaba calmar su corazón acelerado. Su mirada se poso en una pequeña daga que Tonraq tenía detrás de su cinturón. Korra miro las intenciones de su amiga y sacudió la cabeza "{¡No! ¿Estás loca? Estas demasiado débil para...-"} No tuvo tiempo para terminar la frase. Axis ya había tomado la pequeña daga y ahora estaba entre los asaltantes y sus compañeros de la tribu.
"{Lo siento Korra... No puedo correr el riesgo a que te expongas ... Aún no..."} Miraba por encima de su hombro, dándole a su amiga una sonrisa tranquilizadora y volteo su mirada a los asaltantes. Llevando la daga a su muñeca y clavo la punta en su piel. Lanzando un pequeño gruñido por el dolor pero eso no le impedía que la daga siguiera su objetivo. La sangre goteaba sobre la cubierta de madera y algunos hombres dejaron de acercarse. Cuando el arma llego hasta la curva de su brazo, la sangre comenzaba a fluir libremente por su muñeca, terminando caer de rodillas al suelo.
Su respiración comenzó a ser entrecortada, pero tenía que seguir adelante. Así que dejo que el resto de su brazo sobre la cubierta mientras la sangre se mantenía brotando de aquella herida profunda.
"{Espíritus... Por favor, escucha mi súplica...}" Gimió, ya comenzaba a perder demasiada sangre. "{Acepta mi sacrificio de sangre... Y destruye a mis enemigos...}"
La sangre que había teñido en parte en el suelo de madera parecía comenzar a ser absorbido de manera lenta hasta desaparecer. Axis gemía, tratando con su mano libre de mantener la herida cerrada.
Los asaltantes permanecieron en silencio. Todos los alrededores estaba muy tranquilo. Muy callado...
"¡Ella está mintiendo! ¡Esa perra esta mintiendo! Uno de los hombres grito y algunos dio un paso hacía adelante. "¡Vayan por ella! !Mátenlos...- ¡Huark..!" Un gran espíritu oscuro había aparecido detrás de él. Una de sus enormes garras afiladas atravesó a través del pecho del hombre y tomó su corazón. El espíritu había retirado su garra y aquel órgano aún latía. El hombre ya estaba muerto antes de que cayera en la cubierta.
Otros espíritus oscuros aparecieron y atacaron al resto de los asaltantes de aquel barco. Una criatura parecida a un lobo se abalanzo contra tres hombres al mismo tiempo. Rasgándolos a pedazos con sus dientes afilados. Los gritos de aquellos hombres se hizo eco a través de la oscuridad. Pero nadie sintió lastima por ellos.
Otro Espíritu se arrastraba sobre la cubierta. Parecía como un pulpo gigante. Deslizándose sobre el suelo de madera fácilmente. Sus tentáculos tomaron a dos hombres y que a lo último exprimió sus vidas. La sangre y vísceras salían de sus bocas que goteaban sobre la cubierta. Entonces, el espíritu arrojo los cuerpos sobre la cubierta. Los ojos de unos de los hombres estaban abierto por el horror, su boca ligeramente abierta, pero no había grito. Sus ojos en blancos daba por indicado que estaba muerto.
Korra vio como Axis se colocaba de nuevo de pie. Acercándose a donde los espíritus estaban luchando. Luego se acerco a donde estaba el espíritu Lobo, colocando su mano sobre la enorme cabeza. Inclinándose más cerca de la criatura que le susurro algo en su oído. El lobo asintió y antes de que Korra pudiera siquiera reaccionar, el espíritu se fusiono con el cuerpo de Axis.
Axis creció varios centímetros. sus ojos brillaban de un rojo escarlata y sus manos cambiaron, transformándose en unas garras. Sus dientes se hicieron más largos, parecidos a los de un lobo. Su fusión y transformación se había completado. Ella lanzó un gruñido como un animal salvaje, mirando a su alrededor. Muchos de los espíritus se habían ido y sólo quedaba cuatro hombres, que le lanzaba fuego y agua sobre ella. Esquivando el ataque fácilmente.
Estuvo a punto de derribar al primer hombre, cuando de repente un látigo de fuego envolvió su brazo herido. Gritando de forma agónica mientras el fuego quemaba su carne. Mirando a su alrededor para ver de donde había venido ese ataque y sus ojos se detuvo en un hombre alto, feroz y voluminoso. Su ropaje mostraba su condición de primer oficial. Y podía ver el porqué.
El capitán la había visto de manera intimidante, pero este hombre hacía que su corazón saltara su pecho por la adrenalina. Sus ojos se abrieron con horror cuando ella se lanzó a su dirección. Ella aterrizó no muy lejos de los pies del hombre. Levantando sus enormes brazos al aire y bajándolo con fuerza. Algo muy afilado atravesó sus ropas, dando directamente en el hombro. Gritando de dolor, una vez más. El hombre se echo hacía atrás y con eso, el arma que sostenía. Era delgada, corta pero muy afilada.
Levantó una de sus botas y apuntándola a su cabeza. La intensión era clara, quería su cabeza en papilla. Antes de que la bota pudiera llegar a su objetivo, rodó hacía a un lado. Justo a tiempo. Un segundo más y su cabeza habría rodado y manchado en la cubierta de madera. Se arrastró de nuevo sobre sus propios pies y tratando de poner la mayor distancia entre él y ella como pudiera.
Ella gimió y miró su brazo herido. Carne chamuscada decoraba su piel.
Dos miembros de la tripulación pensó que podían aprovechar la oportunidad de tomar a Axis y liberar al resto. Sí, Axis resultó herid, pero ella todavía tenía el poder del espíritu del lobo en ella. Sacando al primero,cortando su garganta y la del otro mediante un poderoso golpe contra su garganta. Rompiendo los huesos de su cuello al instante.
Dos derrotados, varios más se acercaron ... ella jadeaba de agotamiento. El sudor se formaba en su frente y todos los músculos de su cuerpo parecía estar en llamas. Su cuerpo no soportaría la fusión con el Espíritu por mucho tiempo.
"¡No ataques hasta que yo lo diga!", Oyó al hombre ladra y que estaba al mando de la tripulación que estaba detrás de él."¡Katan! ¡Trae tu trasero aquí! "Alzo de nuevo la voz a otra persona.
"Aquí estoy Garuh, ¿Qué necesitas de mi." Preguntó Katan, a juzgar por su uniforme, parecía ser el maestro del capitán del barco. Llevaba un uniforme azul marino, una clara señal de que era descendiente de la Tribu Agua. Dos coletas colgaban al lado de su rostro y el resto de su cabello colgaban sobre los hombros.
"Sana a los hombres y cuidar de que los Espíritus que se alejen, voy a tratar de derrotar a esta mocosa ... ¡Y elimina del mundo a los enfermos de su grupo!", Dijo el hombre, sacando una enorme espada con sus dos manos.
Axis frunció el ceño y tragó saliva. Se dio cuenta de como Katan utiliza el poder de la Luna para su propio beneficio. Es claro que es un poderoso agua maestro agua. Algunos espíritus ya habían desaparecido. Uno de los más grandes trato de atacar al maestro agua pero fácilmente esquivó el ataque del espíritu y este utilizo una mezcla de varios ataques de agua para matar el Espíritu.
Garuh ahora se centro en Axis. Sacando una de sus espadas y trató de desviar sus poderosos ataques con su ágil cuerpo. Era fuerte y alto. Pero eso también le hacía más lento. Ella esquivó otro de sus ataques moviéndose rápidamente hacia un lado. No había esperado que Garuh cambiar repentinamente de movimiento y utilizo la empuñadura de su espada para golpear a uno de los omóplatos de Axis.
Había oído un fuerte crujido y grito de dolor. El impacto había sido tan poderosa que fue enviada directamente a donde estaba Korra y su padre. El dolor nublaba su mente y su visión fue borrosa por un momento. El Espíritu lobo salió de su cuerpo y ella volvió a la normalidad.
Se arrastró de nuevo sobre sus pies. Quedando inestable entre Garuh y la única familia que le quedaba en el mundo. Había esperado que el hombre viniera por ella, pero permaneció donde estaba.
Tenía una sonrisa maliciosa plasmada en su rostro y dejó caer su espada. "Es hora de poner fin a nuestro pequeño juego ..." él sonrió y movió su mano de manera que pudiera crear una carga eléctrica.
No ... sus ojos se abrieron con miedo. Se sentía como si el mundo hubiera dejado de girar cuando la poderosa carga eléctrica iba hacía donde ella estaba.
Algo o más bien, alguien, se movió, quedando entre ella y Garuh. Korra elevo dos dedos hacia adelante. Dejando escapar un grito agónico cuando dejó que el flujo de electricidad pasara a través de su brazo, hasta su abdomen, su espalda hasta el otro brazo y finalmente fuera de su cuerpo. Redirigido el rayo de vuelta de donde vino.
Los ojos de Garuh se habían abierto tanto viendo como su propio ataque fue utilizado en su contra. La carga de gran alcance lo golpeó directamente en el pecho y lo envío volando hacia atrás. Estaba muerto antes de que él supiera que había sido golpeado.
Katan había derrotado otro Espíritu cuando fue testigo de cómo la joven redirigió el rayo de Garuh. "{¡Eso es imposible... Sólo un maestro fuego es capaz de ...}" frunció el ceño cuando se dio cuenta de algo. "{Creo que voy a ser el único que pueda acabar con el Avatar}", dijo y sonrió. Su cuerpo se movía sin problemas mientras él hacía agua control. Él creó unos picos de hielo para enviarlos a las dos jóvenes.
Axis creo una pared de hielo para protegerlos. Se sentó junto a Korra que gimió de dolor. "{¡¿Estás loca ...?!}" Axis gritó. "{¡Sólo has hecho esto una vez antes! Deberías simplemente...-} "Se vio interrumpida cuando una lanza de hielo golpeó la pared y se rompió en miles de pedazo.
Korra estaba jadeando, gotas de sudor resbalaban por su rostro mientras miraba a su amiga a los ojos. Ella le sonrió cálidamente. "{Si piensas que te dejaré morir ... estás jodidamente loca ...}" gimió y giro sobre sus dos pies. "{Vamos...!}" Axis asintió y se levantó también.
Ambas mujeres tomaron una postura defensiva. Korra tenía ambas manos levantadas, mientras que Axis sólo una tenía. La mirada de determinación presentes en sus rostros. Oyeron a Katan mandar a algunos hombres para hacía adelante. Lo cual hicieron. Cuatro de ellos liberaron a los demás. Las armas estaban listos y alimentados por la ira.
Axis esquivó una espada que venía de un lado, como había hecho con Garuh antes. Esta vez fue más rápido y clavó su espada en la espalda del hombre antes de que pudiera atacarla. Ella rápidamente se dio la vuelta para hacer frente a otro, pero estaba cerca ya. No tuvo tiempo de reaccionar lo suficientemente rápido. Viendo venir la espada, sosteniendo la respiración, cerrando sus ojos. Listo para el dolor que se avecinaba.
Nunca llegó. Ella abrió los ojos, dándose cuenta de que su agresor estaba congelado. Ella miró por encima de su hombro y se dio cuenta de que Tonraq y Darkan, otro guerrero, ellos se mantenían en su posición. Ella sonrió y pronunció un 'gracias' a ellos. Korra había utilizado una pequeña daga de hielo para eliminar a uno de sus atacantes. Cayendo en la cubierta, sus manos firmemente apretadas contra su cuello mientras la sangre manaba de una herida. Ella todavía estaba ocupado desviando otros ataques que le habían lanzado.
Tonraq intervino, ayudando a su hija. Congelando los pies de uno de los hombres sobre la cubierta, inmovilizándolo y luego le dio un puñetazo en la cara.
Cuatro de ellos ahora se puso delante Katan. Él entrecerró sus ojos, pero antes de que pudiera reunir el agua para otro ataque, Darkan, Tonraq, Korra y Axis todo se movía en sincronía. Creando una ola masiva para enviar a el maestro agua contra la pared. El agua rodeo su cuerpo, congelándolo. Todo su cuerpo estaba cubierta de hielo sólido, excepto el rostro.
Los cuatro miembros de la tribu se voltearon hacia el resto de los asaltantes. Ellos arrojaron sus armas en señal de derrota. El Avatar junto con la maestra vudú y dos maestros de agua control durante la luna llena era demasiado peligrosos.
Darkan sonrió y asintió con satisfacción. Estaba a punto de caminar hacia los asaltantes cuando dejó escapar un grito agónico. Algo lo había golpeado. Algo fuerte hecho de metal. Mirando a su hombro, sacó algo afilado. Se dio cuenta de que una sustancia verde que cubría la pequeña daga. Veneno...
Un segundo después,sentía como cada arteria en su cuerpo iba explotar. Como si cada músculo de su cuerpo estaba en llamas. Korra y su padre lo miraron y vieron cómo él tomaba una posición de combate.
"{Alguien le ha hecho sangre control ...}", dijo Axis antes de que pudiera pronunciar otra palabra, lo mismo que le paso a él. "¡Argh!" Con su hombro lesionado se vio obligado a arrodillarse en el suelo por increíble dolor. Ella sacó su otra espada con un grito de dolor que se hizo eco en el barco.
Korra vio con horror como Darkan, Axis e incluso su padre se vieron forzado a hacer una posición de combate. Ellos la rodearon. Korra sacudió su cabeza con incredulidad. "{¡No no! ¡No luchare!} "Miró a su alrededor, el miedo se apoderó de su corazón. Ninguno de los miembros de la tripulación parecía se maestro control. Entonces, ¿Quién era el que estaba haciendo esto?
"Vaya, vaya... Nunca pensé que viviría el día para verte Avatar ..." dijo un dulce voz mielosa. El sonido de unos pasos se oía. Poco a poco, una mujer surgió una de las puertas que conducía a las cubierta inferior. Llevaba botas con tacones altos. Y unos ajustados pantalones de cuero. Una blusa suelta que dejaba ver su escote perfectamente. Y un sombrero de capitán con una pluma de color rojo oscuro. Su cabello tan negro como la noche. Labios rojos como rubíes. Una pálida piel impecable y de ojos verdes que se fijaron en la joven Avatar.
Korra miró a la mujer. Sus ojos estaban muy abiertos en estado de shock. "¿Quién...?"
La mujer sonrió divertida. "Mi nombre es June... Yo era la esposa del capitán." Ella dijo, dando unos pasos más hacía adelante. "Lo hecho, hecho está Avatar..." ella sonrió con malicia y movió sus brazos suavemente a través del aire. Axis, Tonraq y Darkan toda la atacaron.
Korra se zambulló hacia adelante y se escapó de los ataques del trío. Ella esquivo el ataque con mucha capacidad, pero no sabía como ganar.
Ella convocó el agua para ayudarse y se las arregló para congelar los pies de su padre, hasta las rodillas y lo inmovilizó.
Uno ... dos más... Pensaba y volvió su atención a Darkan. Trató de agarrarla por el cuello. Sus reflejos le permitieron moverse hacía a un lado, agarrándolo del brazo y enviándolo a volar por encima del hombro. Aterrizando fuertemente en el suelo congelando instantáneamente su cuerpo, pero dejó la cabeza sin congelar para que fuera capaz de respirar.
Unos segundo después cuando se volvió hacia Axis. Una espada atravesó su hombro. Gritando de dolor y rápidamente se la retiró. La punta de la espada fue removido mientras se ella movía hacia atrás. Llevando una mano a su hombro lesionado. Sus ojos se encontraron con los que pertenecía a su amiga. Vio lágrimas que fluían por sus mejillas. "{Má...Mátame..me}" se obligó a decir.
Korra negó con la cabeza. "{¡No!}" Ella esquivó otro ataque y dio un paso hacia atrás. Olvidándose de que Darkan estaba sobre la cubierta, cayendo hacia atrás cuando se tropezó con su cuerpo congelado.
Trató de levantarse, pero la punta de la espada de Axis estaba contra su pecho. Levantando la vista. Su amiga tenía los ojos cerrados cerrada. Negándose a ver como iba a asesinar a la joven mujer.
"Adiós, Avatar." Dijo June e hizo un gesto con las manos en el aire.
Axis levantó la otra espada y se preparó para el golpe final. Su respiración era rápida. Sentía como su corazón iba a explotar.
De repente, de la nada. Recuperó el control sobre su cuerpo. Ella parpadeó, confundida. Mirando a Korra que parecía igual de confundida. "{Qué...}"
Oyeron como la mujer gimió con malestar y ambos volvieron su mirada hacia ella. Un brazo estaba envuelto alrededor de su cuello alguien hacía lo posible de que ella no se moviera.
Korra reconoció al hombre. Él era el que la había tomado de la prisión para llevarla al capitán. Su alivio duró poco cuando June comenzó a conseguir ventaja. Arañando su cuello y su rostro.
La joven Avatar consiguió rápidamente levantarse y corrió para ayudar al hombre. Utilizando su puño para golpear en el pecho de la mujer. Siempre golpeaba donde ella podía. Ella oyó su gemido de dolor, pero alcanzo a su cinturón. Tenía una pequeña daga en su mano y Korra vio con horror cuando aquella daga alcanzo al hombre detrás de June.
Cayendo hacía atrás, June finalmente se libero de su agarre asfixiante. Ella quería clavar la daga hacia el Avatar y casi tuvo éxito. De pronto se dejó de moverse quedando congelada. Tenía la mirada fijamente en la mujer más joven que tenía adelante. Bajó la mirada y respiró profundamente. Korra agarro la daga de la mano de June e hizo que la hoja de la daga atravesara el hielo. Directo a su corazón.
Ella dio un paso hacia atrás y observó cómo la mujer se caía lentamente sobre la cubierta. Sus ojos muy abiertos con incredulidad.
Korra jadeó. Su pecho había sido herido y su corazón parecía que quería escapar de su pecho. Se sentía como si estuviera golpeando contra sus costillas, terminando caer de rodillas.
Viendo como su padre congeló el resto de la tripulación. No les dio la oportunidad de que se levantaran y pelearan contra ellos. Él había liberado Darkan así lo ayudaría.
"{Ganamos..."}, suspiró, su corazón comenzó a latir más lento. "{Axis... nosotros...}" volvió la mirada hacia a su amiga que sentó inmóvil en la cubierta. Korra se sintió enferma y corrió a su lado. Arrodillándose, tomándola entre sus brazos. Con lo último de sus fuerzas, trató de curar las peores heridas de Axis.Aquel profundo corte en su brazo. Se cerró, lentamente, y la hemorragia finalmente se detuvo. Volvió su atención a la herida del hombro. Se las arregló para detener la hemorragia, pero carecía de la fuerza necesaria para cerrar aquella herida.
Unas lágrimas caían en el rostro de su amiga mientras la colocaba inmóvil en su regazo. "{Por favor, no te vayas morir... Por favor...}" Lágrimas amargas caían sobre la ropa de Axis y su rostro. Su cuerpo se estremeció violentamente mientras se balanceaba hacia atrás y adelante mientras sostenía Axis en sus brazos.
De repente, oyó un gemido. Mirando al rostro de Axis que poco a poco abrió los ojos. Una vez que los abrió completamente, ella sonrió a la joven Avatar. "{Je ... estás empapando mi...ropa...}"
Korra dejó escapar una risa cálida y sonrió aliviada. "{¡Me asustaste jodidamente!}"
"{No te deshará... tan fácilmente ... Avatar ...}" Gimió y dejó escapar un profundo suspiro. Tonraq se dirigió hacía las dos mujeres mientras Darkan ayudaba a los otros guerreros.
Él le sonrió a su hija y a Axis. Dejando escapar un suspiro de alivio. "{Ve y libera a los prisioneros Korra... Yo me encargo de Axis}"
Korra miró de Axis y a Tonraq de nuevo. Su amiga asintió. "{Vamos, voy a estar bien ... Voy a estar aquí... Cuando... Vuelvas.}"
"{Bien... Entonces...}" Se puso de nuevo en pie. "{¿Axis...?}"
Axis la miró, una débil pero brillante sonrisa se hizo presente en su rostro.
"{Gracias...}"
Axis le sonrió débilmente. "{De nada...}"
Korra se apresuro a regresar a la prisión. Saltando por encima de los cadáveres que su padre había dejado atrás cuando él y sus hombres lucharon para salir en libertad. Ella uso su agua control para fundir el hielo fuera de la puerta de la prisión. Pateó la puerta y entró. Sus ojos se tuvo que acostumbrar a la oscuridad. "¡Korra!" Escuchó su nombre, sonriendo se dirigió a donde provenía la voz. Arrodillándose a donde estaba la heredera y antes de darse cuenta, sus blanquecinos brazos rodearon su cuello.
"Dioses, no tienes una idea... ¿Estás bien?" Murmuro ella y lentamente se echo hacía atrás para observar a la joven mujer. Las yemas de sus dedos acariciaba suavemente sus mejillas. Moviéndose por la mandíbula y luego por su cuello. Oyó un gritito que venía de la otra mujer.
"¡Korra! ¡Estás herido...! ", Ella coloco una mano pálida encima del hombro del Avatar que había sido atravesado por la espada de Axis.
Ella dejó escapar un suave gemido cuando la heredera tocó la herida. "Yo bien. No ... duele tanto..." Mintiendo y forzando una sonrisa.
Asami movió su mano por el torso de Korra, con los ojos fijos sobre su pecho para asegurarse de que no había otras heridas. Con el tiempo se dio cuenta de lo que estaba haciendo y rápidamente alejo su mano. Lo siento... Yo... Uh..." Sintió un rastro familiar de calor correr hasta sus mejillas. Sintió un brazo deslizarse por detrás de su espalda y otro por debajo de sus rodillas. Lanzó un gritito cuando ella la levanto del suelo, echando sus brazos alrededor del cuello de Korra.
Korra sintió un agudo dolor en su hombro cuando levantó Asami del suelo de madera, pero no le importaba. Sintió una nueva explosión de energía cuando tomo a la mujer sobre sus brazos.
La sureña se volteó, dirigiéndose a la puerta de nuevo. "Están todos libres. Vamos." Diciéndole a los demás que estaban allí. Los demás se colocaron de pie y tenían duda si seguir a la mujer de piel bronceada que sostenía a Asami en sus brazos mientras se abría camino hacía la cubierta superior.
Salieron hacía afuera y Asami respiro profundamente. Alzando su vista hacía la luna llena y sus ojos se llenaron de lágrimas. Ocultando su rostro en el cuello cálido de Korra mientras ella comenzaba a sollozar. Acercándose al camarote que perteneció al capitán y abrió la puerta, entrando. Simplemente, ella paso por encima del cadáver del capitán, acercándose a la cama.
Salieron hacía afuera y Asami respiro profundamente. Alzando su vista hacía la luna llena y sus ojos se llenaron de lágrimas. Ocultando su rostro en el cuello cálido de Korra mientras ella comenzaba a sollozar. Acercándose al camarote que perteneció al capitán y abrió la puerta, entrando. Simplemente, ella paso por encima del cadáver del capitán, acercándose a la cama.
Sentándose en la cama con la heredera todavía en sus brazos. Korra dejó su espalda apoyada contra la cabecera de la cama de roble macizo, colocando a Asami entre sus piernas. Sus rostro todavía estaba enterrado todavía estaba enterrado en el cuello. Su pecho estaba convulsionado violentamente cuando lloró por todo lo que había sucedido. Desde que fue forzada a dejar su país.
Korra solo se sentó allí. Acariciando el cabello negro de Asami. Unos pálidos brazos ahora rodeaban débilmente la cintura de la morena. Sus lágrimas empaparon el tejido de la blusa sin mangas de Korra, pero ella no le importaba. Besando la frente de Asami tiernamente. El llanto desgarrador disminuyó y lentamente se convirtió en un sollozo ocasional. El débil agarre de la pelinegra que tenía alrededor de su cintura cayeron. Su respiración se volvió lenta pero constante.
Korra observo a la heredera y se dio cuenta de que se había quedado dormida justo encima de ella. Sonriendo, volvió su mirada hacia la puerta cuando se dio cuenta de que alguien la había abierto. Era su padre con Axis, quien tenía su brazo alrededor del cuello del hombre más alto. Llevando sus dedos a sus labios que luego señalo a Asami
Su padre asintió y sonrió "{ ¿Te importaría si me quedo aquí? Quería acostarla en el camarote del primer oficial del barco, pero... Los espíritus lo dejaron un poco... destrozado por así decirlo, así que tenemos que limpiarlo con el fin de volverlo a hacer habitable de nuevo.}" Dijo Tonraq en todo susurrante.
"{Claro, no hay problema.}" Korra dijo, cubriendo a Asami y si misma con las sábanas de seda.
"{Al parecer había varios miembros de la tripulación que se escondían allí... De todos modos, los espíritus los encontró.}" Dijo Axis, riendo. Haciendo una mueca cuando Tonraq la ayudo a sentarse en una silla.
Él y otros dos tomaron la cama de madera que había en el camarote del primer oficial y lo llevaron al camarote del capitán. Colocándolo a un lado de la ventana, no muy lejos de donde estaban Korra y Asami. Dejaron otra en la esquina opuesta a la otra cama cerca de la puerta. Tonraq ayudo a Axis a quitarse el vendaje que había usado para sus heridas que Korra había sanado mejor gracias a sus habilidades. Ella gimió y mordió el interior de su mejilla mientras trabajaban sus heridas. Él le sonrió mientras que a su vez la sanaba. Casi todo su torso estaba cubierto de vendas. Incluyendo las de sus pechos.
"{Deberías descansar un poco de mi. Yo y los hombres vamos a interrogar al último miembro de la tripulación que se rindieron.}" Dijo mientras miraba a Axis quien asintió. "{Vamos a ver que tiene que decir y encerrarlos de una vez que hayamos terminado.}" Coloco un odre lleno de agua a un lado de Axis, se acerco a ambas al otro lado de la cama y luego dejo a ambas. "{Las veo luego chicas.}" Dijo con una sonrisa en su rostro, dirigiéndose hacía la puerta, cerrándola tras él.
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Korra observo a la heredera y se dio cuenta de que se había quedado dormida justo encima de ella. Sonriendo, volvió su mirada hacia la puerta cuando se dio cuenta de que alguien la había abierto. Era su padre con Axis, quien tenía su brazo alrededor del cuello del hombre más alto. Llevando sus dedos a sus labios que luego señalo a Asami
Su padre asintió y sonrió "{ ¿Te importaría si me quedo aquí? Quería acostarla en el camarote del primer oficial del barco, pero... Los espíritus lo dejaron un poco... destrozado por así decirlo, así que tenemos que limpiarlo con el fin de volverlo a hacer habitable de nuevo.}" Dijo Tonraq en todo susurrante.
"{Claro, no hay problema.}" Korra dijo, cubriendo a Asami y si misma con las sábanas de seda.
"{Al parecer había varios miembros de la tripulación que se escondían allí... De todos modos, los espíritus los encontró.}" Dijo Axis, riendo. Haciendo una mueca cuando Tonraq la ayudo a sentarse en una silla.
Él y otros dos tomaron la cama de madera que había en el camarote del primer oficial y lo llevaron al camarote del capitán. Colocándolo a un lado de la ventana, no muy lejos de donde estaban Korra y Asami. Dejaron otra en la esquina opuesta a la otra cama cerca de la puerta. Tonraq ayudo a Axis a quitarse el vendaje que había usado para sus heridas que Korra había sanado mejor gracias a sus habilidades. Ella gimió y mordió el interior de su mejilla mientras trabajaban sus heridas. Él le sonrió mientras que a su vez la sanaba. Casi todo su torso estaba cubierto de vendas. Incluyendo las de sus pechos.
"{Deberías descansar un poco de mi. Yo y los hombres vamos a interrogar al último miembro de la tripulación que se rindieron.}" Dijo mientras miraba a Axis quien asintió. "{Vamos a ver que tiene que decir y encerrarlos de una vez que hayamos terminado.}" Coloco un odre lleno de agua a un lado de Axis, se acerco a ambas al otro lado de la cama y luego dejo a ambas. "{Las veo luego chicas.}" Dijo con una sonrisa en su rostro, dirigiéndose hacía la puerta, cerrándola tras él.
Y bueno mi gente bella este es el nuevo capítulo, que espero que disfruten jajajaja se que hubo mucho gore en este nuevo episodio ewe x'D bueno creo que para los que les gusta el gore les parecerá genial =D
